y que sus demonios dejen de violarla.
Que no le tenga miedo a la luz
que abandone la noche.
Que deje de postergarlo y escale la montaña.
Que se desnude completamente y se bañe en las cascadas
de la antigua ciudad abandonada.
Y escuche la canción de los abuelos, que nos miran
esperando que accedamos a la reunión de la familia.
Que se abra al sacrificio
para pagar por sus ofensas
que acepte los cuchillos
que matarán a todas sus bestias
Que se inmolen sus deseos y que sepa perdonarse
por la destrucción del mundo donde ahora nada nace.
Que se deje morir, y termine con el hambre.
Que no atrase los procesos creyendo que ya es tarde.
Que una fuerza protectora superior a la mía
alcance su existencia y que empiece un nuevo día.
(No pido que evada las leyes universales
pido que evada al universo
y no haya nada condenable.)